La anticoncepción de urgencia hace referencia a los métodos que pueden utilizarse para prevenir un embarazo después de una relación sexual no protegida o en caso de fracaso del método contraceptivo habitual.
Su eficacia depende del método utilizado y del tiempo transcurrido desde el coito, pero en líneas generales si se utiliza dentro de los cinco días posteriores a la relación de riesgo puede prevenir el 95% de los embarazos.
Hay que tener en cuenta que la anticoncepción de urgencia no es un método:
❌ abortivo. Las píldoras anticonceptivas de urgencia impiden el embarazo al evitar o retrasar la ovulación y no pueden provocar un aborto. Los DIU de cobre impiden la fertilización al provocar un cambio químico en el espermatozoide y el óvulo antes de que lleguen a unirse. La anticoncepción de urgencia no puede interrumpir un embarazo establecido ni estropear el embrión en desarrollo.
❌ de prevención de las infecciones de transmisión sexual. El preservativo, tanto femenino como masculino, es el único método que evita al mismo tiempo el embarazo y las infecciones de transmisión sexual, incluido el VIH.
❌ de uso habitual (a excepción del DIU de cobre, que evita el embarazo a largo plazo).